Fundamentos aplicados para la prescripción de ejercicio físico para la mejora y el mantenimiento de la salud ósea.

Resumo

El hueso es un órgano dinámico en continuo recambio que se adapta a través de varios procesos biológicos. Dentro de unas “ventanas” de uso mecánico, con umbrales definidos por una tensión efectiva mínimafavorece los procesos de modelación, remodelación y reparación ósea. Las mayores cargas fisiológicasen el hueso se generan mediante contracciones musculares las cuales se obtienen por medio deacciones corporales. Las resistencias generadas por parte del propio peso contra las cuales los músculoshan de ejercer oposición mediante brazos de palanca permiten multiplicar en ocasiones, la fuerzaejercida durante el ejercicio intenso. El impacto, la velocidad de carga o la tensión aplicada influyenen la capacidad osteogénica del movimiento, por lo que el tipo de ejercicio juega un papel importanteen la mejora y el mantenimiento de la salud ósea. Mientras que el ejercicio aeróbico que posee escaso o ningún impacto, podría estar asociado a una bajadensidad mineral ósea, aparentemente el ejercicio físico en el que se producen impactos muestra unefecto osteogénico en localizaciones óseas importantes a nivel clínico. Sin embargo, este tipo deejercicios pueden generar problemas en la salud de las personas mayores agravando la osteoartritis ensus articulaciones, por lo que entrenar en medios que favorecen un menor desgaste articular como elacuático ejecutando los movimientos con la mayor intención de velocidad posible puede resultar unaalternativa