Biogeografía aplicada al estudio de enfermedades zoonóticasel caso del virus del Nilo Occidental en Europa y África

  1. GARCÍA CARRASCO, JOSÉ MARÍA
Dirigida por:
  1. Raimundo Real Director/a
  2. Antonio Román Muñoz Gallego Codirector

Universidad de defensa: Universidad de Málaga

Fecha de defensa: 19 de septiembre de 2023

Tribunal:
  1. Pelayo Acevedo Lavandera Presidente/a
  2. Ana Luz Márquez Moya Secretario/a
  3. David Roiz Pereda Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 822576 DIALNET lock_openRIUMA editor

Resumen

INTRODUCCIÓN: La biogeografía es una disciplina que se extiende desde la biogeografía histórica hasta la biogeografía ecológica, incluyendo el estudio de enfermedades infecciosas, conocido como patogeografía. Esta área de estudio revela la íntima conexión entre la salud humana, animal y ambiental, ya que más de la mitad de las enfermedades infecciosas que afectan a los seres humanos provienen de animales, denominadas zoonosis. Esto cobra especial relevancia en el contexto de las enfermedades emergentes, como la COVID-19 o la fiebre del Nilo Occidental. La fiebre del Nilo Occidental es un ejemplo de zoonosis en la que las aves y los mosquitos desempeñan un papel crucial en su ciclo de transmisión. Los modelos de distribución, basados en regresión logística y lógica difusa, permiten comprender mejor la propagación de enfermedades y evaluar la favorabilidad para eventos como brotes. La patogeografía es esencial para elaborar mapas de riesgo que faciliten la toma de medidas preventivas y de control, como la vigilancia epidemiológica y la vacunación, con el objetivo de reducir la incidencia y mortalidad de estas enfermedades. OBJETIVOS: 1. Elaborar mapas predictivos de riesgo para la aparición de brotes, con el fin de poder anticipar el riesgo de la transmisión del virus del Nilo Occidental en el continente europeo y estudiar su dinámica de propagación. 2. Investigar la relación entre la salud humana y la animal en la Península Ibérica y determinar si la salud animal puede servir como un indicador del riesgo de brotes por el virus del Nilo Occidental en la población humana y elaborar mapas de riesgo de alta resolución en la península. 3. Detectar zonas favorables para la circulación del virus del Nilo Occidental en África a partir de los diferentes componentes animales (mosquitos, aves y mamíferos) implicados en el ciclo del virus (vectores, reservorios y hospedadores finales). 4. Elaborar mapas de riesgo para el continente africano que sean de utilidad médica, tanto para la población local como viajera, dado que los datos de la distribución del virus están subestimando el riesgo. 5. Estudiar el papel de las aves como vehículo para la dispersión del virus del Nilo Occidental a una escala intercontinental e identificar las especies de aves migratorias que podrían estar involucradas en la propagación del virus entre África y Europa. 6. Analizar cómo el cambio climático podría alterar la distribución del riesgo de transmisión del virus del Nilo Occidental en el sistema Afro-Paleártico desde una perspectiva Una Sola Salud, comprendiendo la salud humana y la animal. CONCLUSIONES: 1. Se ha avanzado en el conocimiento de las condiciones ambientales que favorecen la aparición de la enfermedad, identificando las características climáticas, antrópicas y topo-hidrográficas que están relacionadas con la aparición de brotes. 2. En Europa las cuencas fluviales constituyen unidades vinculadas con la propagación de la enfermedad, debiendo ser consideradas, por tanto, como unidades de gestión. En el contexto de cada cuenca las zonas más bajas son las más favorables para la aparición de brotes, moduladas por características concretas relacionadas con las temperaturas y el desarrollo agrícola y ganadero de cada cuenca. 3. Los modelos de riesgo elaborados a partir de la aplicación de la lógica difusa son de utilidad para predecir los brotes de virus del Nilo Occidental en la siguiente temporada de transmisión permitiendo predecir el lugar, la intensidad e incluso la temporalidad de los brotes. 4. Los caballos constituyen un excelente sistema de alerta temprana para anticiparse a los brotes en humanos en la Península Ibérica, pues la salud humana y la salud animal es interdependiente, tal y como señala el enfoque Una Sola Salud. 5. Las cuencas hidrográficas del Guadalquivir, Guadiana y Tajo son las zonas ibéricas que presentan mayor riesgo para la aparición de brotes, tanto en humanos como en caballos. Además, se ha detectado que estas son las zonas en las que históricamente han ocurrido brotes tanto en España como en Portugal, y las zonas más favorables para futuros brotes. En la cuenca del Ebro comienzan a aparecer áreas con riesgo elevado, principalmente en las zonas cercanas a su desembocadura. 6. Los humedales Ramsar, de importancia internacional para las aves, tienen un papel relevante en el mantenimiento del virus del Nilo Occidental en su ciclo enzoótico en África. La elevada concentración de aves y mosquitos favorece la circulación del virus y, por tanto, deberían ser áreas de vigilancia intensiva para la detección de brotes en humanos y animales. 7. Las zonas de África con mayor riesgo de transmisión del virus del Nilo Occidental a humanos son también las zonas más turísticas. Ejemplos claros son Marruecos, Túnez y Sudáfrica. Además, los mapas de riesgo elaborados permiten identificar zonas de alto riesgo en países donde la enfermedad no ha sido detectada aún. 8. Dentro de cada país africano, la alta resolución de los modelos de riesgo permite identificar zonas de mayor y menor riesgo, lo que puede resultar de gran ayuda para la población local y viajera. Los médicos que desempeñan su labor en sanidad exterior, o de viajes, pueden beneficiarse de estos mapas al ser de utilidad para recomendar medidas preventivas antes de la realización de un viaje, así como para un mejor diagnóstico a la vuelta del mismo. 9. Se ha demostrado que las zonas de mayor riesgo para la transmisión del virus del Nilo Occidental en África y Europa se encuentran conectadas mediante especies de aves migratorias, que utilizan ambas zonas a lo largo de su ciclo anual: se reproducen en Europa, invernan en África y usan numerosas zonas de descanso durante sus migraciones. 10. Las herramientas biogeográficas, como los corotipos, permiten utilizar a las aves migratorias como elementos de conexión intercontinental del riesgo zoonótico del virus del Nilo Occidental. Se han identificado 61 especies de aves migratorias que podrían estar involucradas en la propagación del virus entre continentes. 11. La conexión permanente entre ambos continentes, debida al proceso de migración de las aves, puede favorecer la dispersión a grandes distancias de nuevas cepas, por lo que se debería incluir la monitorización de estas aves en los sistemas de control y seguimiento de la enfermedad. 12. El cambio climático, basado en los modelos de circulación atmosférica y escenarios socio-económicos, supondrá cambios en la distribución del riesgo de transmisión del virus del Nilo Occidental en el contexto Afro-Paleártico. 13. De acuerdo a las proyecciones futuras el norte de África será la zona donde más decrecería el riego de la enfermedad, mientras que el centro y norte de Europa serán las zonas que experimentarían un mayor incremento del riesgo. 14. La favorabilidad como concepto de la lógica difusa ha resultado ser de gran utilidad para el estudio del virus del Nilo Occidental en lugares poco o nada muestreados. La lógica difusa permite integrar modelos de los diferentes componentes implicados en su ciclo. Además, la favorabilidad, al ser independiente de la prevalencia, posibilita la creación de mapas de riesgo incluso con datos que subestiman la distribución real de la enfermedad.