Vinculación municipal y estrategias de articulación nacional y transfronterizaun acercamiento a las redes de infraestructuras de transporte en los municipios y el eje troncal en Bolivia

Resumen

Finalizaban las décadas perdidas' en Bolivia con el auge de los gobiernos dictatoriales y una larga historia de dependencia menoscabada por la deuda externa, que dejó de herencia fuertes vínculos de subordinación a EE.UU., de un Estado débil que opta a mirar más hacia afuera con actores, que serán desde 1985, los sujetos del nuevo proyecto estatal, el neoliberal. Por su parte, los habitantes del territorio boliviano, que miraban más hacia adentro que hacia afuera, principalmente los indígenas, los mineros y campesinos, habían desaparecido como actores colectivos del escenario político, en una Bolivia descohesionada, fragmentada, y de derrota económica y social. Con la pérdida de credibilidad en las propias instituciones y la falta de credibilidad acumulada de organismos internacionales, sus recomendaciones pierden peso'. En este sentido, ¿es aún procedente tener una visión de afuera hacia adentro? El estudio de la economía del desarrollo finalmente había mostrado una confrontación de la viabilidad del modelo neoliberal principalmente en los países pobres, las nuevas tendencias basadas en las teorías del decrecimiento' hacen más dinámico el debate y fortalecen el análisis; adicionalmente el impacto territorial ha sido tan provocador desde este modelo económico que promueve el consumo y la obsolescencia programada, que solo se puede percibir con absoluta claridad desde el individuo y no desde el conjunto social generalizado. En este sentido, la escala vivencial puede medir el estado de bienestar con mayor precisión que cualquier otra escala. Las dificultades de accesibilidad a los municipios para ofertar sus productos mediante infraestructuras de transporte, limita la oportunidad de mejorar las condiciones de vida de sus habitantes y ampliar la base estrecha de la economía boliviana frágilmente sustentada en la explotación de recursos primarios. La articulación de los centros poblados bolivianos y de las infraestructuras desarrolladas en sus territorios, con una participación popular en marcha, podrían ser factores inductores del crecimiento económico de escala local, toda vez que su aplicación práctica sería participativa y con transferencias crecientes de recursos económicos hacia los gobiernos municipales. Sin embargo el análisis de la problemática del desarrollo a partir de la articulación del territorio y de las infraestructuras aplicadas en él, conforman un sistema complejo, y esa complejidad precisa un diagnóstico diferencial y transversal. En análisis previo, se intuían elementos funcionalmente deficientes en la escala departamental; la importancia de un eje 'vertebrador' compuesto por las ciudades capitales más relevantes del país y unas precarias condiciones de las infraestructuras fuera del área de influencia de este eje troncal'. Adicionalmente, se intuía también la relevancia de un corredor bioceánico' que atraviesa la franja central de un país en condición 'landlocked'. Por otra parte, una creciente presencia de municipios con carencias organizativas y crecientes recursos por transferencias, avanzaban a paso lento para desplegar sus capacidades y vocaciones. Y finalmente, una conformación social en efervescencia, demandando la finalización de un modelo tanto económico como social, que había dado suficientes muestras de ineficacia y anacronismo, y dejaba entrever la inevitable transformación de una Bolivia que se debatía entre la homogenización y la pluriculturalidad multiétnica. Así, surge la lectura del estudio de la estructuralidad boliviana, que había sido resultado de una trayectoria dispuesta históricamente en una praxis política y económica desde afuera hacia adentro y desde la escala global hacia la vivencial. Los efectos que se fueron desplegando, afectaron a esta última escala, y se propone por tanto, investigar más a fondo las respuestas desde la propia escala vivencial, pero en forma contestataria, desde el nivel gubernamental más cercano a la escala vivencial: la local; y con ella, desde la organización e institucionalización municipal y comunitaria.