Calidad de vida del superviviente oncológico pediátrico sometido a un trasplante de progenitores hematopoyéticos

  1. Lorenzo González, Rosalía
Dirigida por:
  1. Luis Madero López Director/a
  2. J. Sevilla Navarro Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 22 de junio de 2017

Tribunal:
  1. Rafael Fernández Delgado Presidente/a
  2. José Luis Ayuso Mateos Secretario/a
  3. Carlos Solano Vercet Vocal
  4. Marta Gonzalez Vicent Vocal
  5. Cristina Grávalos Castro Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 555393 DIALNET

Resumen

Los estudios de calidad de vida en adolescentes y adultos jóvenes, que han requerido de un trasplante de progenitores hematopoyéticos tras un tratamiento oncológico, son escasos y no son concluyentes. Además, el campo del trasplante está en continua expansión por la incorporación de nuevas estrategias terapéuticas médicas (nuevo tratamientos quimioterápicos, diversos tipos de trasplante) y psicológicas (la incorporación de la atención psicológica durante el tratamiento), que hacen necesario que este tipo de estudios sean actualizados. Nuestro trabajo, por lo tanto, se centrará en el estudio de esta población más allá de 4 años del trasplante y analizando las variables psicológicas más importantes a la hora de valorar alteraciones en los pacientes supervivientes, y que influyen o pueden influir directamente en la recuperación o adaptación a la normalidad del sujeto. La calidad de vida (como constructo global), y otras más específicas (autoestima, ansiedad, depresión, apoyo social, síntomas y comportamiento), que pueden ser fundamentales a la hora de determinar la calidad de vida de un sujeto. Del presente estudio podemos concluir que: la calidad de vida de los pacientes que han requerido de un trasplante de progenitores hematopoyéticos tras un tratamiento oncológico evaluada al menos 4 años después del mismo se puede catalogar de buena a excelente. En general no existen alteraciones del estado de ánimo en los niveles de ansiedad, ni de depresión. Tampoco en el apoyo social, autoestima o comportamiento. Los síntomas más frecuentes que presentan los trasplantados en el momento del estudio son: falta de concentración, nerviosismo, dolor y preocupaciones. Estos dos últimos son los que se perciben como más molestos. Tanto en calidad de vida, como estado de ánimo, apoyo social, autoestima, síntomas, y alteraciones del comportamiento, los pacientes adolescentes y adultos jóvenes trasplantados, y evaluados a largo plazo, presentan en su mayoría valores similares o superiores a los observados en un grupo control de su misma edad, sexo y situación laboral.