Perfil externalizante e internalizante y estrés postraumático en menores expuestos a violencia de génerocaracterísticas y comorbilidad

  1. Martinez Perez, Antonia Mª
Dirigida por:
  1. Juan José López García Director/a
  2. Concepción López Soler Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 15 de diciembre de 2015

Tribunal:
  1. Rosa María Baños Rivera Presidenta
  2. Julio Pérez López Secretario/a
  3. María Ángeles Espinosa Bayal Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Objetivo: El propósito de esta investigación fue conocer la afectación a nivel: i) psicopatológico, perfil internalizante y externalizante, y ii) de estrés postraumático, en niños/as expuestos a violencia de género, y su relación con el maltrato sufrido. La muestra estuvo compuesta por 153 menores, de edades comprendidas entre los 8 y 17 años (49.7% niños; 50.3% niñas). Método: Para la evaluación de las variables psicológicas descritas se aplicó el Child Behavior Checklist (CBCL; Achenbach y Edelbrock, 1983), y la Child PTSD Symtom Scale (CPSS; Foa, Johnson, Feen, y Tredwell, 2001). El análisis de frecuencias y tablas de contingencia se utilizó para hallar la prevalencia en los síndromes empíricos y estrés postraumático, por sexo y edad. La prevalencia de los síndromes empíricos se calculó en base a la puntuación del Pc ? 93. Respecto al estrés postraumático se han empleado diversos criterios: DSM-IV-TR, DSM-5 y criterios de TEPT Parcial (Asmundson, Norton, Allerdings, Norton y Larsen, 1998; Hickling y Blanchard, 1992; Jaycox et al., 2009; Scheeringa, et al., 2003, Scheeringa, Zeanah y Cohen, 2010; Stein, Walker, Hazen y Forde, 1997). Los análisis de varianza (ANOVAs), han permitido comparar los diferentes grupos (para comparaciones post-hoc se utilizó el valor del estadístico Dunn-Bonferroni). El análisis de correlaciones permitió establecer las relaciones entre variables. Resultados: Los escolares (8-12 años) presentaron mayor prevalencia que los adolescentes (13-17 años), tanto en sintomatología internalizante como externalizante (CBCL), significativa estadísticamente. Por sexo, no se encontraron diferencias significativas en relación a las anteriores agrupaciones. En estrés postraumático, las niñas manifestaron mayor prevalencia que los niños, aunque no fue significativa. Con respecto a la edad, los adolescentes informaron de más sintomatología TEPT que los escolares. Teniendo en cuenta los criterios diagnósticos de TEPT, según DSM-IV-TR, la prevalencia fue del 18.3%; según DSM-5, del 15%; y con criterios TEPT Parcial osciló entre el 28.8% y el 35.3%, de acuerdo con los distintos autores. Se encontraron tasas de prevalencia en sintomatología grave en el CBCL más elevadas que en sintomatología leve en aquellos menores que presentaron TEPT Parcial, resultando estadísticamente significativas. Se calculó el número de menores que manifestaron, a la vez, estrés postraumático y uno o más síndromes empíricos, mediante distintos criterios. Cabe señalar que el 54.6% de los menores mostró tres o más síndromes, además de sintomatología de TEPT Completo (DSM-IV-TR) y Parcial. Así mismo, se obtuvo una correlación marginalmente significativa de signo positivo entre el número de síndromes en el CBCL y la puntuación total de TEPT en la CPSS. El análisis correlacional, mostró que a mayor número de síndromes en el CBCL más intensidad en cada uno de los tipos de maltrato sufridos por los menores. Los análisis de varianza confirmaron que la gravedad clínica de la sintomatología de tipo Externalizante en comparación con los menores que no manifestaron sintomatología clínica, estaba relacionada significativamente con un mayor promedio de maltrato físico a la madre y trato negligente hacia el menor por parte del padre biológico, mientras que la gravedad clínica de la sintomatología Internalizante, lo estaba con mayor intensidad del maltrato físico y emocional a la madre, mayor exposición del menor a este tipo de maltrato, y mayor intensidad en el maltrato emocional ejercido contra el menor. Conclusiones: El número de tipos de maltrato y la intensidad de la violencia a la que están expuestos los menores, cuyas madres sufren violencia de género por parte de su pareja o expareja, se encuentran estrechamente relacionados con la gravedad de las manifestaciones de estrés postraumático y problemas psicológicos generales, así como de su frecuente comorbilidad.