Efecto de la intervención nutricional en escolares y adolescentes con obesidad con y sin resistencia a la insulina

Laburpena

INTRODUCCIÓN: La obesidad infantil es una enfermedad crónica multifactorial asociada a resistencia a la insulina (RI) responsable de complicaciones metabólicas y vasculares. La intervención precoz es fundamental para frenar su progresión. OBJETIVO: Evaluar el efecto de la intervención nutricional y por actividad física reglada (AFR) personalizadas en escolares y adolescentes con obesidad con y sin RI. METODOLOGÍA: Estudio observacional, analítico, transversal y prospectivo de escolares y adolescentes de 8-17 años con obesidad, en dos fases: a) Fase I: estudio transversal de alteraciones metabólicas y vasculares; b) Fase II: intervención nutricional (12meses) y combinada con AFR (4meses). El criterio de obesidad según OMS fue z-score del índice de masa corporal (zIMC) >+2 DE y el de RI índice HOMA ≥3,6. Se realizó evaluación clínica, antropométrica, bioquímica, dietética, gasto energético y ecografía de carótida. Se repitió la evaluación antropométrica y bioquímica post-intervención. La intervención consistió en consejo dietético y educación alimentaria (mensual) y la AFR incluyó 120 minutos a la semana de intensidad moderada-vigorosa, combinando ejercicios aeróbicos y de resistencia. RESULTADOS: En la Fase I (n=213) se incluyeron 196 niños con obesidad (63,8% niños, 62,8% púberes) y 17 controles, con edad media 12,1±2,1 años. Se observó obesidad moderada e intensa asociada a alteraciones metabólicas muy significativas (dislipemia, elevación del ácido úrico y alteraciones en el metabolismo de la glucosa). La tensión arterial (TA) y rigidez arterial fueron significativamente mayores, junto a un ligero aumento en el grosor íntima-media (GIM). Un 63% de los niños con obesidad presentaron RI (9,3% síndrome metabólico) con mayor adiposidad central a igual zIMC que los niños sin RI (nRI), mayor dislipemia y TA. En la Fase II (n=109) finalizaron la intervención un 49,5% (57,4% niños, 51,9% púberes, 40,7% obesidad grave, 78,8% RI). Se evidenció hábitos dietéticos poco saludables y estilo de vida sedentario, dedicando los RI menos tiempo a AF que los nRI. Tras 12 meses de intervención se redujo el zIMC (especialmente en varones y en los más graves) y resto de parámetros antropométricos, excepto la circunferencia de la cintura. Se constataron mejoras bioquímicas significativas (glucemia, HbA1c, HOMA, PCR y GPT) especialmente en RI. El programa combinado (4 meses) supuso mejoras superiores a las obtenidas solo con intervención nutricional, manteniéndose a largo plazo. CONCLUSIONES: La intervención nutricional en escolares y adolescentes con obesidad moderada y grave produce mejoras significativas en parámetros antropométricos y bioquímicos, con mayor impacto en los casos graves y aquellos con RI. El programa combinado condicionó mejoras significativamente superiores a las logradas solo con intervención nutricional, manteniéndose el efecto beneficioso.