La radiación solar y la fotoprotección

  1. C. Sanz García 1
  2. M. Pérez Leal 2
  3. J. Cortijo Gimeno 2
  1. 1 Ciencias de la Salud. Sección Predepartamental de Medicina. Universitat Jaume I de Castellón de la Plana
  2. 2 Departamento de Farmacología. Facultad de Medicina. Universitat de Valencia
Revista:
Actualidad en farmacología y terapéutica

ISSN: 1698-4277

Año de publicación: 2021

Volumen: 19

Número: 2

Páginas: 88-108

Tipo: Artículo

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Resumen

La atmósfera refleja y filtra solo una parte de la radiación solar que alcanza la superficie de la tierra. La piel juega un importante papel defensivo frente a los daños potenciales tanto físicos, químicos como biológicos que pueden ser dañinos para el ser humano. Entre los daños más agresivos que se producen sobre la piel se encuentra la acción de las radiaciones solares por exposición directa al sol, que contienen un amplio espectro electromagnético, luz ultravioleta, visible e infrarrojos. La radiación UV puede inducir efectos nocivos sobre la piel como quemaduras solares, inmunosupresión, envejecimiento de la piel y cáncer de piel. Se considera que las radiaciones ultravioleta de alta energía (UVB, 280-315 nm y UVA 316-400 nm) son las responsables de producir estos efectos adversos. Es necesario prevenir los efectos nocivos producidos por la exposición a la luz solar con productos protectores dermofarmacológicos. El uso indiscriminado de estos compuestos hace necesaria una revisión que diferencie los filtros solares químicos u orgánicos, físicos o inorgánicos y biológicos o naturales que permita conocer cuáles son los más adecuados para los distintos tipos de piel y para las diferentes radiaciones solares, así como su toxicidad y las nuevas perspectivas que se están estudiando.