Fluctuación estacional y dinámica microbiana en una catena afectada por el abandono del cultivo en la cuenca del Guadalentín (Murcia)

  1. Imeson, Anton C.
  2. Cerdà, Artemi
  3. García Álvarez, Alejandro
  4. Cammeraat, L. H.
Revista:
Pirineos

ISSN: 0373-2568

Año de publicación: 1995

Número: 145-146

Páginas: 3-11

Tipo: Artículo

DOI: 10.3989/PIRINEOS.1995.V145-146.143 DIALNET GOOGLE SCHOLAR lock_openAcceso abierto editor

Otras publicaciones en: Pirineos

Resumen

La distribución espacial de la actividad biológica muestra una clara influencia del uso del suelo. Las zonas con vegetación potencial, Pinus halepensis, tienen altos niveles de carbono microbiano (1.200 μg C g-1), mientras que los suelos situados entre macollas de Stipa tenacissima y el campo abandonado tienen niveles intermedios (300 μg C g-1). El suelo cultivado siempre presenta muy baja biomasa microbiana (< 150μg C g-1). Excepto en este caso, se ha comprobado un crecimiento de la biomasa de carbono microbiano desde junio a febrero. En parte, la estabilidad de los agregados confirma las diferencias existentes a nivel espacial, en las que la zona de Pinus halepensis favorece agregados más estables. La secuencia para el resto de las unidades sería: matorral de esparto > terreno abandonado > cultivo. La estabilidad de los agregados del suelo muestra una clara relación espacial con la biomasa de carbono microbiano. Estacionalmente esta dependencia también existe, aunque con un periodo de retraso que es diferente para cada tipo de suelo.

Referencias bibliográficas

  • Alien T.F.H. y Starr, T.B. (1 982): Hierarchy. Perspectives for Ecological Complexity. The University Chicago Press, Chicago, 310 p.
  • Aspiras, R.B., Allen, O.N., Harris, R.F. yChestersG. (1971 ): The role of microorganisms in the stabilization of soil aggregates. Soil Biology and Biochemistry, 3: 347-353
  • Barois, 1., Villemin, G., Lavelle, P. y Toutain, F. (1993): Transformation of the soil structure through Pontoscolex corethrurus (Oligochaeta) intestinal tract. Geoderma. 56: 57-66.
  • Cerda, A., Garcia-Alvarez, A. Cammeraat, L.H., y imeson, A.C. (1 994): Agregación del suelo en una catena afectada por el abandono del cultivo en la cuenca del Guadalentín (Murcia). I. Estabilidad y distribución de los agregados del suelo. En: Efectos Geomorfológicos del abandono de tierras, (J. M. García-Ruiz y T. Lasanta, Eds.). Sociedad ESpañola de Geomorfología: 9-19, Zaragoza.
  • Dexter, A.R. (1 988): Advances in characterization of soil structure. Soil and Tillage Research, 11,1 99-238.
  • Garcia Alvarez, A. y Ibañez, J.J. (1994): Seasonal fluctuations and crop influence on microbiota and enzyme activity in fully-developed soils of central Spain. Arid Soil Research and Rehabilitation, en prensa.
  • Harris, R.F., Chesters, G. y Alien, O.N. (1966): Dynamics of soil aggregation. Advances in Agronomy, 18: 107-169.
  • Imeson, A.C. y Vis, M. (1 984): Assessing Soil Aggregate Stability by Water-drop Impact and Ultrasonic Dispersion. Geoderma, 34: 185-200.
  • Lynch, J.M. y Bragg, E. (1985): Microorganisms and soil aggregate stability. Advances in Soil Science , 2: 1 33-1 71
  • Oades, J.M. (1993): The role of biology in the formation, stabilization and degradation of soil structure. Geoderma, 56: 377-400.
  • Oades, J.M. y Waters, A.G. (1 991 ): Aggregate hierarchy in soils. Australian Journal of Soil Research. 29: 815-828.
  • Simon, H.A. (1973): The organization of complex systems. En Patee, H.H. (Ed.): Hirerachy Theory, 1-28. Braziller, New York.
  • Tisdall, J.M. y Oades, J.M. (1 982). Organic matter and water-stable aggregates in soils. Journal of Soil Science, 33: 141-163.
  • Vance, E.D., Brookes, P.C. y Jenkinson, D.S. (1987): An extraction method for measuring soil microbial biomass C. Soil Biology and Biochemistry, 19: 703-707.