Arquitectura civil privada en Xàtiva. Siglos XIII-XIX

  1. Camarasa Balaguer, Pablo
Dirigida por:
  1. Luis Arciniega García Director

Universidad de defensa: Universitat de València

Fecha de defensa: 10 de abril de 2017

Tribunal:
  1. Amadeo Serra Desfilis Presidente
  2. Arturo Zaragozá Catalán Secretario/a
  3. María Carmen Gómez Urdáñez Vocal
Departamento:
  1. Història de l'Art

Tipo: Tesis

Teseo: 466314 DIALNET

Resumen

La ciudad de Xàtiva cuenta con uno de los cascos urbanos de carácter histórico de mayores dimensiones de todo el patrimonio valenciano y en su interior guarda un conjunto arquitectónico de enorme relevancia por motivos tales como la antigüedad, la diversidad tipológica o la monumentalidad de las construcciones. A ello cabe sumar su rica historia y la notoriedad que llegaron a adquirir muchos de los personajes que la habitaron en algún momento, alzándose todo como un compendio que dio como resultado un conjunto compuesto por numerosos edificios de carácter religioso y muchos más de carácter civil, destacando la proliferación de casas señoriales y burguesas. Esta arquitectura civil, de clara influencia mediterránea -atendiendo a tipologías que giran alrededor de un patio que se encarga de vertebrar el espacio interior-, viene condicionada principalmente por la canalización de las aguas procedentes de manantiales vecinos como el de Bellús o el de Agua Santa. Su existencia llevó a que se diese una alta concentración de edificios de estas tipologías sobre todo en el distrito Ciutat, pero también se construyeron muchas en el distrito Mercat. Se trata, por tanto, de uno de los conjuntos arquitectónicos más interesantes de la Corona de Aragón. La historia de esta ciudad contada desde el punto de vista de su arquitectura la conforman, además de grandes construcciones como el Castillo, la Seu, las iglesias de nave central única, los conventos, el Almudín y el Hospital, un gran número de casas que un día fueron de particulares y que albergaron a la segunda concentración de nobleza más grande de todo el reino de Valencia, siendo, por ende, uno de los más destacados conjuntos urbanos de toda la Corona de Aragón. El estudio y la puesta en valor de setenta y ocho inmuebles, repartidos en los distritos Mercat y Ciutat, situados intramuros, y el barrio de Barreres, ubicado extramuros, sirve para corroborar estas palabras, pues hablan de la singularidad del patrimonio setabense. Su preservación es el principal y más importante ejemplo para mostrar a propios y extraños esta afirmación, mientras que su desaparición se llevaría consigo el atractivo histórico-cultural con el que a día de hoy cuenta dicha ciudad. Desde finales del siglo XIX y sobre todo desde el siglo XX, el abandono de las grandes casas ha sido progresivo, de manera que la mayor parte han sufrido un grave deterioro, quedando completamente devaluadas por la sociedad del momento hasta el punto de llegar a desaparecer. La arquitectura y la historia de éstas fue olvidada y muchas se compartimentaron para convertirse en edificios de viviendas, donde diversas familias, mediante el levantamiento de nuevos tabiques para separar los grandes espacios de los que originariamente se disfrutaba, y obtener más de un habitáculo privado por planta, pasaron a habitar las residencias de la poderosa aristocracia setabense de épocas pasadas. Asimismo, en la configuración urbanística y sobre todo arquitectónica de Xàtiva jugaron un papel trascendental artífices y propietarios. Los artífices, encargados de proyectar y construir edificios con interesantes arquitecturas, de alterar el urbanismo en determinados puntos o de remodelar construcciones existentes, organizados en torno a cofradías originariamente y alrededor de gremios después, para, finalmente, dar paso a los titulados por la Academia; y los propietarios, benefactores de estas propuestas, miembros de poderosos -y, a veces, no tan poderosos- linajes que jugaron un notorio papel en la historia de Xàtiva.